Resulta que entro al bondi a las 22:00 para volverme a casa, y a la señorita que dejo subir primero le come la máquina las monedas. Entonces el chofer frena, haciéndose cargo de la situación.
Se levanta de su asiento y se acerca a la expendedora. Imitando a un cirujano cardiovascular empieza a intentar reparar la maquinita. ¡¡PLAF!! Manotazo acá, golpe allá. Plaf, Plaf. Toca los botoncitos, caen las monedas, vuelve a poner el precio del pasaje, vuelve a introducir las monedas. Plaf, Plaf. Golpe alto, golpe bajo, patada alta, correr, correr, bloqueo: Friendship!
Final: La máquina ya no devuelve las monedas y la piba se ahorró $ 0,50. Me dice a mí que pruebe. Lo miro con cara de: "Ya probaste con dos pesos". Pero bueh, lamento no tener una monedita de $ 0,05... pongo una de 25 que me la traga.
- Bueh, pasá, pasá- termina.
Me ahorré $ 2,25. =)
2 comentarios:
Seguro era el 180 =)
Estoy haciendo una queja formal a la empresa por el pésimo servicio que prestan. Hoy la termino y mañana la mando por correo.
Si no me dan bola, a la CNRT!
Después te cuento las novedades, para Viaje en Bondi. jeje
Saludos
Exacto! Dale, dale que publicamos! (?)
Publicar un comentario